En el año 153 a. C. tiene el primer conflicto grave con Roma, al dejar entrar en la ciudad a unos fugitivos de la tribu de los bellos, procedentes de la ciudad de Segeda (actualmente sus restos están situados entre Mara y Belmonte de Gracián (Zaragoza). Los numantinos, al mando de Caro de Segeda, consiguen derrotar a un ejército de 30.000 hombres mandados por el cónsul Quinto Fulvio Nobilior, pero hubo que lamentar que su jefe, Caro, muriera en la batalla.
Tras veinte años repeliendo los continuos e insistentes ataques romanos, en el año 133 a. C., el senado romano confiere a Publio Cornelio Escipión Emiliano El Africano Menor la labor de destruir Numancia, a la que finalmente pone sitio, levantando un cerco de 9 km. apoyado por torres, fosos, empalizadas, etc. Tras 13 meses de hambrunas, enfermedades y tras agotarse sus víveres, los numantinos deciden poner fin a su situación. Algunos de ellos se entregan en condición de esclavos al ejército de Publio Cornelio Escipión Emiliano, mientras que la gran mayoría de los numantinos decidieron suicidarse, prevaleciendo su condición de libertad frente a la esclavitud de Roma.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario